Por: Jorge Tigrero
El director estadounidense Kevin Smith, incursiona en un género diferente con su nueva película llamada Red State. Filme que se llevó el premio a mejor película en el Festival de Cine de Sitges.
Red State, cuenta con un reparto encabezado por el actor John Goodman, quien interpreta a un policía encargado de investigar distintas sectas religiosas en pueblos de Estados Unidos. La película no se centra en la búsqueda las sectas, sino en la psicosis colectiva de un grupo de fanáticos que llegan al límite de enfrentarse con armamento militar a los policías.
Antes de estrenar Red State, Smith se caracterizaba por realizar producciones en el género de la comedia. Títulos como Clerks I y II, Chasing Amy y su última película Cop Out. Comedias de situaciones irreverentes y temas que combinaban líos amorosos, un poco de acción y situaciones juveniles, eran las temáticas principales de sus películas.
Red State no deja de lado un ligero toque de comedia, al contar con jóvenes actores como Michael Parks quien junto a un grupo de universitarios tratan de vivir una vida sin reglas y sin pensar en las consecuencias, este enfoque nos trae a la mente imágenes de sus mejores comedias.
Red State, combina violencia, temáticas religiosas y una fuerte crítica social sobre el gobierno americano y su relación en cuanto al manejo del terrorismo y ocultismo. Antes de la presentación en el festival, el cambio de registro, generó fuertes críticas pero la temática arriesgada y sobre todo el mensaje conquistaron finalmente al público.
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