7 ene 2010

EXPRÉSATE: UN FOCO

Escrito por: Jorge Tigrero



Jueves o viernes.

Apreté el botón verde y escuché tu voz, un tono bajo; pero tan dominante.

Mañana ven en la tarde que nos vamos a ir a la playa; quiero que vengas - replicó tu voz.

Lo que usted diga señorita.

(El día designado)

Llevaba lo justo -dinero y ropa- para un día, sabiendo que me quedaría más de 7...
Toqué el timbre y saliste...
Tu vestido de tiritas, tan ligero como el aire (como me gusta verlo volar)

- Entra al cuarto de la derecha; por favor cambia el foco del consultorio... no sé porqué no enciende.

Lo que usted diga señorita.

Mientras pensaba en decir algo más; te fuiste del consultorio, directo a los cuartos de la izquierda.

De repente, apareció un foco en mi mano.

Una silla y un cable.

Me paré en la silla y procedí con la operación.

La curiosidad... veía por la ventana lo que sucedía; abriste una puerta y la cerrabas, poco a poco, mientras mirabas a tu alrededor. Yo aparté la mirada y me centré en el foco.

Quizás esté con alguien en ese cuarto... (No debería importarme, ella no es nada para mí)

Una sensación de enojo viene con el viento.

De pronto, apareció en el patio una chica alta de cabello castaño y cuerpo esbelto; llevaba gafas, chaqueta y minifalda de cuero. Una figura para admirar.

Apareciste de la nada y le dijiste algo al oído.

Yo veía todo desde la ventana. Ajustando y reajustando el foco.

Ella te besó en la frente. Abriste la puerta y se fue.

(Suspiraste)

¿Cómo puedes dejarme así? - Dijiste apretando los labios.

Miraste mi ventana. Yo, miraba el foco.

¡No importa!, ella se fue, pero estás tú.

Tú siempre eres bueno - pensaste.

Abriste la puerta.

Me senté en la silla.

Tu vestido de tiritas, tan ligero como el aire,¡Qué placer hacerlo volar!

Tú siempre eres bueno - susurraste en mi oído.

Te até con el cable y el foco se prendió.





0 comentarios:

Publicar un comentario

 
;